La Maison de Famille Longchamp: el arte de vivir francés en Shanghái
En Shanghái, en el corazón del barrio histórico de la Concesión francesa, Longchamp ha inaugurado la Maison de Famille Longchamp: un lugar singular que encarna tanto el alma parisina de la Maison como su apertura al mundo. Más que un simple espacio, esta finca catalogada como monumento histórico se vive como un lugar íntimo, acogedor y creativo, donde el arte de vivir a la francesa dialoga con la energía cosmopolita de la metrópoli china. Un auténtico símbolo de transmisión, cuenta una historia familiar que comenzó en 1948 y sigue en movimiento.
Una saga familiar que mira hacia el futuro
Desde 1948, Longchamp se escribe como una auténtica saga familiar, impulsada hoy en día por la tercera y cuarta generación. Fieles a los valores fundacionales de transmisión, convivencia y compartir, los herederos de la Maison perpetúan el espíritu único de Longchamp.
La Maison de Famille Longchamp ilustra esta historia en movimiento. Su símbolo, el nido, encarna el savoir-faire transmitido con paciencia de generación en generación. Al igual que el pájaro que construye su refugio, la familia Longchamp ha forjado un legado creativo hecho para durar. Cada habitación rinde homenaje a un miembro de la familia: la entrada y el salón de Jean Cassegrain, cálidos y acogedores, se despliegan como un gabinete de curiosidades. La escalera de Olivier Cassegrain destaca el espíritu familiar y la historia de Longchamp a través de los retratos y fotografías de archivo que adornan el rellano. La cocina y el comedor de Sophie Delafontaine celebran la creatividad y el placer de las grandes mesas. El jardín refleja la visión de Adrien Cassegrain, orientada hacia la sostenibilidad y el medio ambiente. En la planta superior, la biblioteca encarna la curiosidad de Hector Cassegrain, mientras que el vestidor de Juliette Poupard expresa la elegancia parisina y el espíritu de moda de Longchamp. Más que una simple residencia, la Maison se convierte así en el espejo de una familia viva y unida, vinculada por el arte de crear, compartir y proyectarse hacia el futuro.
Un escaparate modernista con toques parisinos
Enclavada en la Concesión francesa de Shanghái, conocida como el París del Este, la Maison de Famille Longchamp se erige como un puente entre París y China. Construida en la década de 1940 y clasificada como monumento histórico, esta residencia modernista de 150 m² de ladrillo se distingue por su tejado a cuatro aguas de tejas rojas y sus altas ventanas de acero de inspiración francesa, que le confieren una elegancia atemporal. En el exterior, un decorado romántico se despliega entre mesas cubiertas con manteles blancos, hortensias y muebles de hierro forjado, recreando la delicada atmósfera de un jardín parisino.
En el interior, cada detalle rinde homenaje al arte de vivir francés. El parqué en espiga y las molduras recuerdan a los apartamentos haussmannianos. La vajilla perpetúa la artesanía y realza los platos y bebidas del Café Longchamp, una cafetería permanente que celebra el arte de vivir a la francesa. Entre croque-monsieur, madeleines y canelés, cada sabor invita a viajar, un delicioso vínculo entre París y Shanghái. Las obras de arte, desde David Nash hasta Etel Adnan, dialogan con los iconos del diseño francés, como la mesa auxiliar de René-Jean Caillette, el par de sillones de Pierre Guarriche de 1953, el sofá azul de Pierre Paulin o los sillones Mushroom de 1958.
Estas elecciones estéticas tejen un vínculo íntimo entre patrimonio y modernidad, tradición y audacia. La biblioteca reúne obras de literatura francesa, arte y arquitectura, así como cómics emblemáticos para los más jóvenes, como Astérix y Obélix o Los pitufos. Los juegos de mesa tradicionales (bilboquet, solitario, petits chevaux) cultivan el espíritu de convivencia. En la sala de juegos familiar, una mesa de madera maciza de Billard Nicolas recuerda las tardes compartidas. En el jardín, el juego de la rana, transmitido de generación en generación, perpetúa esta tradición francesa.
Más que una tienda insignia, la Maison de Famille Longchamp es una residencia viva, un lugar de intercambio y cultura donde el espíritu parisino se despliega en el corazón de Shanghái, con toda la elegancia y la creatividad que definen a la Maison desde hace más de 75 años.