Formadores contribuyen a transmitir las 69 competencias identificadas entre los artesanos de la piel de Longchamp

GUARDIÁN DE UN SAVOIR-FAIRE ATEMPORAL
La artesanía como legado. Desde 1948, los talleres de la Maison preservan un savoir-faire excepcional. Sus artesanos combinan rigor e innovación para dar vida a piezas concebidas para perdurar en el tiempo.
CREAR UN FUTURO OPTIMISTA PARA EL PLANETA
Innovar para proteger mejor el medioambiente. Reducir la huella de carbono, utilizar materiales certificados y fomentar la economía circular: cada acción cuenta en la construcción de un futuro más responsable y sostenible.
Fabricante francés de marroquinería desde 1948, Longchamp perpetúa un savoir-faire artesanal único, fruto de la excelencia de los equipos en sus talleres y de estrictos procesos de fabricación, avalados por el sello Entreprise du Patrimoine Vivant (EPV).
Cada creación nace de un gesto preciso, heredado y perfeccionado generación tras generación. Desde los artesanos del cuero hasta los proveedores y socios internacionales, toda la cadena de valor de la Maison está guiada por la voluntad de ofrecer productos en los que el saber hacer Made by Longchamp sea sinónimo de calidad y durabilidad.
Comprometida con la transmisión de este savoir-faire excepcional, la Maison trabaja también por reducir el impacto medioambiental de sus productos mediante un diseño responsable y una selección cada vez más sostenible de materiales, garantizando así la excelencia de hoy y de mañana.
Comprometidos con la preservación y el desarrollo del savoir-faire, Longchamp se esfuerza por perpetuar la excelencia de la artesanía en sus talleres. En 2023, Longchamp lanza el programa AFEST (Action de Formation En Situation de Travail) para poner en valor la artesanía de la piel en sus talleres franceses. Gracias a este programa, Longchamp ha identificado las competencias clave de su savoir-faire y ha formado a expertos encargados de transmitir sus aptitudes a los artesanos del mañana, así como a sus proveedores y socios de todo el mundo.
Longchamp adopta un enfoque responsable y sostenible optimizando el uso de los materiales y reduciendo su impacto medioambiental. Mediante el análisis del ciclo de vida (ACV), la Maison mide la huella medioambiental de sus productos, desde la extracción de las materias primas hasta el final de su vida útil. También favorece los materiales certificados, en particular GOTS (Global Organic Textile Standard) para el algodón y la seda, así como las pieles etiquetadas por el Leather Working Group (LWG), garantizando la transparencia, la responsabilidad y limitando el impacto medioambiental.
Longchamp refuerza su transparencia y su compromiso responsable. Con el proyecto «Unfold», lanzado en 2023, la marca informa a sus clientes sobre el origen de los materiales, el proceso de fabricación y el impacto medioambiental de sus productos mediante un código QR integrado en la etiqueta. En 2025, todas las gamas de marroquinería de Longchamp estarán equipadas con este código QR, que ofrecerá una transparencia total sobre su fabricación. Además, Longchamp evalúa a sus proveedores de materias primas y socios mediante Ecovadis, asegurándose de que sus prácticas cumplen con los requisitos de RSC, y les apoya en un proceso de mejora continua.
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Descubra el universo de los talleres Longchamp.
La relación de la Maison con el planeta constituye un pilar fundamental de su compromiso medioambiental. A través del análisis anual de su huella de carbono y la identificación de las acciones necesarias para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero, Longchamp se involucra activamente en la transición energética y en la disminución de su impacto ambiental. Con este objetivo, la Maison ha lanzado su Estrategia Climática 2033, orientada a reducir de forma significativa su huella de carbono global.
Gracias a su evaluación anual del carbono lanzada en 2023, Longchamp ha definido su Estrategia climática 2033 para reducir significativamente su huella de carbono en los próximos diez años. Esta trayectoria se basa en cuatro principios clave:
1- Reducir la dependencia de los combustibles fósiles y sus derivados: limitando el transporte aéreo, favoreciendo los combustibles más responsables y reduciendo el impacto medioambiental de los tejidos sintéticos.
2- Desarrollar un sector de marroquinería más respetuoso con el medio ambiente: mediante una mejor trazabilidad, la reducción de los recortes y una menor producción de carbono.
3- Diseñar productos duraderos y reparables: haciéndolos más resistentes, facilitando las reparaciones y concienciando a los clientes.
4- Ser ejemplares en términos medioambientales: movilizando a nuestros equipos, implicando a nuestros proveedores y fomentando las medidas ecológicas.
Longchamp se compromete a optimizar su consumo energético, transporte y logística para reducir su impacto medioambiental. Para limitar su huella de carbono, la Maison regionaliza su producción, reduce el transporte aéreo y favorece el transporte marítimo. Mediante el apoyo al proyecto Neoline, a partir del verano de 2025 Longchamp adoptará buques de carga con propulsión vélica para reducir su huella de carbono. El objetivo es reducir la huella de carbono del transporte en un 60 %. Además, por primera vez, se medirá la huella hídrica del proceso de curtido, con resultados previstos para 2025. Esta iniciativa es esencial para gestionar mejor los recursos hídricos y reducir el impacto general.
Longchamp diseña productos sostenibles, combinando calidad y reparabilidad. La Maison ha desarrollado una tabla de evaluación que otorga a cada producto una puntuación basada en varios criterios: índice de desechos, uso de materiales certificados, facilidad de mantenimiento, durabilidad, reparabilidad y reciclabilidad. Esta herramienta orienta a los equipos, desde el diseño hasta la fabricación, hacia un diseño más ecorresponsable.
Longchamp refuerza su compromiso con la sostenibilidad desarrollando nuevos servicios dedicados a la reparación, para dar una segunda vida a los productos. Cada artículo reparado representa un recurso preservado y una huella medioambiental reducida. En 2024, se han restaurado 75.000 productos, 45.000 de ellos en Segré y 30.000 a escala internacional.
Longchamp sitúa así su experiencia en el centro de un enfoque de economía circular, que combina sostenibilidad y responsabilidad.
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